A seis años de la Ley de Pago a 30 Días, un nuevo sondeo volvió a encender las alertas: 8 de cada 10 pymes declara recibir pagos con atraso respecto del plazo legal, con demoras promedio que bordean los 44 días y casi un 29% reportando esperas superiores a 60 días. La mayor parte de los deudores son grandes empresas y otras Pymes, y un 60% de los negocios dice haber estado al borde del cierre o debió financiarse por morosidad. Medios económicos confirman la tendencia: pese a la normativa, el retraso persiste y golpea la caja de los negocios más pequeños.
Para una Pyme chilena, la morosidad no es solo un problema financiero; es un freno comercial que obliga a postergar campañas, limitar inventario o pausar contrataciones. El riesgo se agrava cuando la cartera de clientes se concentra en pocos pagadores “grandes”: cualquier atraso se convierte en una bola de nieve que afecta sueldos, arriendos y proveedores. Pero también hay una oportunidad: una estrategia publicitaria y de posicionamiento bien diseñada puede diversificar la demanda, abrir nuevos segmentos y desacoplar los flujos de caja del comportamiento de uno o dos clientes dominantes.
El objetivo que proponemos para los próximos 90 días es reducir la dependencia de los 3 principales clientes al generar y calificar demanda en al menos 2 segmentos nuevos (por ejemplo, otra industria, otra región o un buyer distinto dentro de la misma empresa objetivo), con campañas multicanal orientadas a captar decisiones de compra de ciclo corto.
Nuestra hipótesis es que, al diversificar la base de clientes vía campañas de respuesta y marca, la pyme bajará su riesgo de mora y su volatilidad de caja, al tiempo que incrementará la estabilidad de ingresos mensuales, incluso si los plazos de pago del mercado no mejoran de inmediato.
Este planteamiento se sostiene en dos hechos. Primero, la evidencia de que los atrasos siguen siendo estructurales: el sondeo reciente registra 91% de pymes con pagos al menos 15 días tarde y un promedio de 44 días de demora; además, la prensa económica reporta que el fenómeno persiste pese al marco legal. Segundo, la teoría financiera y de gestión de riesgo respalda la diversificación como mecanismo para disminuir exposición a un pagador individual, reduciendo la probabilidad de “estrés de caja” por impagos.
Desde Paratupyme.com, nosotros diseñamos y ejecutamos campañas publicitarias orientadas a esa diversificación: definimos segmentos por propensión de compra, levantamos creatividades y mensajes que abordan objeciones de pago, branding, y, al cierre, analizamos las métricas de la campaña para realizar ajustes en las siguientes. El foco es atraer clientes con ciclos de decisión más cortos y riesgos de cobro diferenciados, para repartir la exposición comercial sin prometer resultados de venta. Agenda tu reunión de asesoría a costo cero AQUÍ.
En síntesis, el 80% de las pymes sigue sufriendo atrasos, y esperar “que el mercado mejore” no es estrategia. La salida está en comunicar distinto para vender a un mix de clientes más amplio, con mensajes que prioricen confianza y prueba rápida, y en sostener esa presencia con campañas consistentes. Nosotros podemos acompañarte en ese plan: pongamos sobre la mesa tus segmentos potenciales, definamos una pauta realista y ejecutemos una primera oleada que empiece a mover la aguja de tu cartera.
